Es muy importante que los fertilizantes se apliquen de la forma correcta para obtener el resultado deseado.
La aplicación de un abono tipo granulado como Fertiver® o Fertiver Combi®, de manera generalizada, es la siguiente:
Medir el área que se necesita fertilizar. Generalmente se utilizan 20-30 gr de fertilizante por metro cuadrado. Es muy importante revisar las cantidades de fertilizante que se necesitan.
Si hay que fertilizar áreas grandes, como jardines completos, se puede utilizar una abonadora de fertilizante. De esta manera, se consigue que el fertilizante llegue a la tierra de manera más uniforme. Hay que tener especial cuidado con utilizar la cantidad de fertilizante necesaria y no aplicar demasiado en la misma área, ya que puede quemar las plantas.
Aplicar el fertilizante directamente en la tierra y alrededor de las plantas que lo necesitan, ya sea con maquinaria especializada o a voleo. Si se decide optar por este último método, es recomendable el uso de guantes de jardinería, ya que los fertilizantes contienen químicos que pueden lastimar la piel.
Finalmente, se debe regar la tierra donde se ha aplicado el fertilizante. Así se logra que el abono se disuelva mejor en la tierra.
Es importante realizar correctamente el proceso para evitar quemar la planta. Por lo general, se aconseja no fertilizar en forma radicular una planta que fue recientemente trasplantada. Se debe esperar como mínimo unos 30 días.